Belgrano ganó un partido durísimo

Por lo que le costó. Por lo que lo buscó. Por todo lo que se fajó. Por todo eso y por mucho más, Belgrano consiguió un triunfazo frente a un Deportivo Riestra que se la puso muy complicada. Así, logró su quinta victoria consecutiva para mantener la diferencia en la punta de la PN.

Empujones por un lado, topetazo por el otro. Una escena de lucha libre en un corner y agarrones por todos lados antes de un centro al área de Matías Vega. Esa fueron las imágenes más repetidas del primer tiempo en Alberdi. No busquen una jugada colectiva, un remate desde lejos que se fue cerquita o un cabezazo en el palo. Ni cerca. Un partido más luchado que jugado. Un partido que ninguno de los dos quiso perder. Y un poco de boxeo.

El Blanquinegro llevó a Córdoba su estilo tradicional: cuchillo entre los dientes y mucha entrega para equiparar la jerarquía del rival con el hambre propia. Por algo era uno de los tres conjuntos que llegó invicto al inicio de la fecha. ¿Los otros? Chaco For Ever e Instituto. Por algo es el que menos goles recibió en la categoría (apenas cuatro en diez encuentros). Tomalo o dejalo, pero así es su forma.

Del otro lado, al Pirata le costó muchísimo sobreponerse a esa situación: no pudo jugar, Miño y Zapelli no tuvieron tanta injerencia y Vegetti se la pasó luchando con los centrales. ¿Oportunidades de peligro? Ninguna clara para un local que necesitaba sumar de a tres.

Las emociones llegaron en el complemento. Primero, el Celeste rompió el cero con una corrida de Bordagaray y el gol de Vegetti. Luego, Fernández sorprendió con el empate. Y para hacer la heroica, Farré mandó a la cancha a Ulises Sánchez, que 95 segundos más tarde, clavó un tiro libre, al palo del arquero, para el 2-1 definitivo. La pelea fue para la B. ¡Segundos afuera!