Menos de 3 metros hasta Rayan | Rescate en directo del niño atrapado en el pozo de Marruecos


Del estado físico de Rayan, el pequeño de cinco años que lleva cuatro días en el pozo, poco se sabe, pero las tareas de rescate siguen sin descanso día y noche, ahora en su segunda fase: la apertura de un túnel de cinco metros y medio en horizontal hasta el fondo del pozo. Solo falta metro y medio.
Durante tres días, los equipos de búsqueda han utilizado excavadoras para cavar una zanja paralela. Este viernes, comenzaron a excavar un túnel horizontal para llegar al niño atrapado. La agencia de noticias MAP de Marruecos informó que se pidió ayuda a expertos en ingeniería topográfica.
El medio estatal de noticias SNRT News aseguró este viernes que el niño todavía estaba vivo.
La región montañosa alrededor de Chefchaouen es muy fría en invierno y, aunque se le ha proporcionado comida a Rayan, no está claro si se ha alimentado. También se le ha suministrado agua y oxígeno mediante un tubo.
"Esta segunda fase del rescate de Rayan está a punto de terminar. Estamos corriendo para llegar al niño y la excavación va según lo planeado", anunció hoy el rescatista principal Abdelhadi Tamrani a la televisión estatal 2M.
Rayan, de cinco años, cayó el martes a un pozo en la ciudad montañosa de Chefchaouen. El pozo tiene 32 metros de profundidad y se estrecha a medida que desciende desde un diámetro de 45 cm en la parte superior, lo que significa que los rescatistas no pueden bajar por sí mismos para recuperar al niño.
Gracias a él se conseguirá llegar hasta Rayan, que lleva dentro del pozo desde el pasado martes y cuyo estado físico se desconoce.
El accidente de Rayan ha generado mucha simpatía y solidaridad en las redes sociales de todo el mundo.
“Los rescatistas literalmente están moviendo una montaña para salvar al pequeño #Rayan, espero que sus esfuerzos no sean en vano y que todos los que rezaron por él tengan respuesta a sus oraciones”, opinó un surfista. "Espera pequeño Rayan, espera por favor", imploró otro usuario de Twitter.
El drama comenzó con la desaparición del niño el martes 1 de febrero alrededor de las 14:00 horas (horario local): "Toda la familia se movilizó para buscarlo hasta que supimos que había caído al pozo", dijo a la prensa local la madre del niño.
Rayan cayó accidentalmente en un pozo seco de 32 metros, estrecho y de difícil acceso, excavado cerca de la residencia familiar en el pueblo de Ighrane, cerca de Bab Berred, en la provincia de Chefchaouen, en el norte de Marruecos.
“Vinimos a dar una mano a los rescatistas. Rayan es un niño de nuestra región, roguemos a Dios que se salve”, testifica un voluntario. "No nos iremos hasta que salga del pozo".
En condiciones difíciles, los rescatistas de Rayan han trabajado sin interrupción durante las últimas horas a la luz de potentes focos, dando un toque lúgubre al lugar de la tragedia, según informan testigos presenciales. Las comunicaciones son muy malas en esta cuenca aislada de Marruecos.